Quienes conocen la provincia, de seguro habrán escuchado sobre un lugar mágico y escondido en la sierra Bolivarense, pues se trata de “El trapiche de la cabaña” ubicado a 2 minutos de la parroquia San Lorenzo en el cantón Guaranda, sitio que desde hace más de 14 años, forma parte de los territorios turísticos de la zona.
Esta idea que nació de Héctor Galo Pavón Moran (+), imbabureño de nacimiento y bolivarense de corazón por más de 44 años, depositó toda la confianza y dedicación por crear un emprendimiento novedoso y sobre todo único en esta parte de la provincia, trayendo lo típico del subtrópico y su tierra natal, hasta lo frío del sector.
Los sembríos de caña de azúcar que mantiene el lugar llama mucho la atención de propios y extraños, además de la preparación de sus derivados, como: el jugo de caña, la panela granulada o la melcocha. "El trapiche de la cabaña", mantiene un diseño rústico y confortable, sobre todo preservando una armonía con la naturaleza.
Frases de motivación, dichos populares o refranes conocidos, adornan cada rincón de este acogedor lugar, pues para Galo, significaba toda una vida de aprendizaje y sabiduría.
La adaptación de la flora como: mango, papaya, maracuyá, kiwi, canela, guayusa, resulta interesante a la vista, ya que son plantas originarias de otras zonas. Por otra parte, la ubicación estratégica del sitio ha permitido aprovechar muchas bondades turísticas y actividades recreativas para quienes deciden trasladarse a un ambiente libre y poder respirar aire puro.
Hoy, su esposa y sus cuatro hijos son quienes tienen un trabajo arduo, pues luego del fallecimiento de Galo, han decidido seguir con la actividad, al momento el lugar se encuentra en remodelación para brindar una mejor atención al público.
“Queremos seguir con lo que nuestro padre empezó, estamos trabajando juntos, en familia, para aproximadamente dentro de 2 meses poder abrir nuestras puertas nuevamente a todos quienes deseen pasar un momento ameno y relajante”. Destacó Antonio Pavón, hijo.
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